Comienza
la temporada para muchos de los deportistas, tanto profesionales
como, sobre todo, amateur, los principales valores de este blog.
Empezamos a correr, pedalear, nadar o, en definitiva, a
movernos…pero…¿lo
estamos haciendo con garantías?
Lo
primero que debemos plantearnos antes de comenzar una nueva temporada
es concertar una cita con nuestro médico deportivo o nuestro
fisiólogo. Estas personas serán las encargadas de realizarnos una
prueba de esfuerzo, que nos asegure
que nuestro cuerpo se encuentra en perfectas condiciones
para realizar actividad física.
Este
hecho evitará problemas mayores en el futuro, o llevarnos algún que
otro susto durante el entrenamiento. Es
un “seguro de vida”
tanto para el deportista, como para el técnico, el cual debe ser el
encargado de informar a los atletas los sitios donde acudir como,
posteriormente, interpretar los resultados. Aprovecho para recordar a
todos los técnicos que estas pruebas nos ayudarán a saber quien
está o no capacitado para realizar ciertas actividades, y para los
deportistas, saber
diferenciar entre un buen profesional, que cuida de su salud y se
preocupa por ellos, y un “entrenador-aficionado” que no nos dará
seguridad ni calidad.
Además,
estas pruebas ayudan a los entrenadores a establecer el entrenamiento
con mayor rigurosidad, ya que nos facilita los límites y el margen
de mejora de cada persona.
Por
último, os recuerdo que el coste de estas pruebas oscila entre los
50-70€… ¿Cuánto
vale nuestra salud?.
Recordad, según estudios del CSD, 1
EURO invertido en ACTIVIDAD FÍSICA, equivale a 3 EUROS ahorrados en
SANIDAD
Xuso
García ¡El deporte eres TÚ!